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27/4/10

El Ceremonial del uso del paraguas

"Los Paraguas", Auguste Renoir, 1885. Óleo sobre lienzo, 180.3 x 114.9 cm.
Es curioso observar, sobre todo en las zonas lluviosas de muchos países del mundo, como se utiliza el paraguas como un elemento indispensable para moverse cómodamente por la calle sin mojarse demasiado. En el centro de Bruselas (llamada la ciudad donde siempre llueve) se puede ver gran cantidad de paraguas y ninguno chocarse con otro.
En nuestro país el uso del paraguas es más una portación que un elemento de utilidad para cubrirse de la lluvia.
A continuación marcaré algunas reglas de convivencia para cuando usamos el paraguas.
1. Los paraguas deben ser de un tamaño adecuado para circular por la calle. Es muy bonito ver algunos diseños muy originales, pero nada prácticos para utilizarlos en la calle, al menos, en calles muy concurridas. Ultimamente hoteles y empresas multinacionales entregan paraguas enormes que luego encontramos en calles muy transitadas por peatones y se transforme en un gran peligro.
2. Los paraguas no se abren en los sitios cerrados o cubiertos. No hay ninguna razón para abrir un paraguas en un sitio cerrado o cubierto, a no ser que sea un negocio que vende paraguas. Además, en algunas culturas, es un gesto que, dicen, trae muy mala suerte. Pero supersticiones aparte, no hay porqué molestar a otras personas abriendo un paraguas dentro de cualquier recinto.
3. Cuando circule por una vereda angosta o calle peatonal, la persona más alta es la que levanta el paraguas para que pase la persona más baja con su paraguas.
4. En calles con grandes aglomeraciones de público, y por lo tanto, de paraguas, debe guardarse el mismo comportamiento que anteriormente indiqué. Los más altos levantan el paraguas para que pasen los más bajos. Lo más importante es tener conciencia que llevamos un paraguas y que hay muchas otras personas que también.
5. El paraguas cerrado, si no es de mano o plegable que pueda caber en un bolso, cartera o similar, se lleva a modo de bastón pero nunca perpendicular al cuerpo que pueda tropezar e incluso pinchar a otra persona.
6. Un paraguas se cierra a la puerta de la casa o edificio donde se va a entrar. Cuando llegamos a la puerta del edificio o casa, giramos, con el paraguas en la mano, hacia la calle y en ese momento lo cerramos. No es demasiado correcto entrar con el paraguas abierto a una casa o establecimiento. Al ingresar a una casa el paraguas ya debe estar cerrado. Si no está a la vista el paragüero se debe preguntar inmediatamente dónde pones el paraguas.
7. Cuando se comparte paraguas, el más alto es el que lo va a portar. O el más joven, o el caballero, etc.
9. Si se encuentra con alguna persona en la calle, y se detiene para saludarla y conversar, debe quedar un solo paraguas abierto.
Actualmente los colores y las combinaciones de los paraguas han variado mucho al origen. Aunque cada uno utilice el paraguas que le sea más cómodo es importante saber que los paraguas de mango curvo son los de hombres y los de mango mocho o sin curva son los de mujer.
Los niños no deben usar paraguas ya que es un “juguete” peligroso.

4 comentarios:

Verónica Tomas dijo...

Muy lindo post Lion!

Leo Avalos dijo...

GRacias Vero !

Unknown dijo...

Interesantísimo.

Leo Avalos dijo...

Muchas gracias: en noviembre daré un curso en la UBA. Saludos. Leo Avalos